Desde el Gobierno de Estados Unidos subieron la apuesta para conseguir información que permita la detención del mexicano Ismael Zambada García, alias El Mayo, sucesor de Joaquín “el Chapo” Guzmán al frente del Cártel de Sinaloa. Ahora la recompensa será de U$S 15 millones.
El aumento de la retribución ofrecida es "acorde con la posición de liderazgo" de Zambada García tras las detención, en enero de 2016, de "el Chapo", por entonces el narcotraficante más poderoso del mundo.
Extraditado a Estados Unidos en 2017, Guzmán fue sentenciado en julio de 2019 a cadena perpetua, condena que cumple en una prisión de alta seguridad en Colorado.
Desde 2004, Estados Unidos ofrecía hasta US$ 5 millones por datos sobre Zambada García, uno de los criminales más buscados de México, inculpado de narcotráfico por una corte federal en Washington en enero de 2003.
La acusación formal, revelada en julio de 2003, alega que entre agosto de 2001 y junio de 2002, Zambada García y sus cómplices enviaron una tonelada de cocaína al área de Nueva York/Nueva Jersey, más de una tonelada y media de cocaína a Chicago, y unos 22 kilos de cocaína a California. Toda la droga tenía un valor estimado de U$S 47,4 millones.
Los fiscales estadounidenses apuntan contra Zambada García como uno de los históricos narcotraficantes mexicanos, entre los que están Miguel Ángel Félix Gallardo y Ernesto Fonseca Carrillo, los fundadores del Cártel de Guadalajara, acusados del secuestro y asesinato en 1985 del agente especial de la DEA Enrique Camarena.
El ascenso de Zambada García, de 73 años, comenzó en la década de 1990 como miembro principal del grupo de Amado Carrillo Fuentes, donde se convirtió en uno de los narcotraficantes más importantes de México, capaz de transportar toneladas de cocaína, marihuana y heroína a Estados Unidos, aseguran las autoridades estadounidenses.
Zambada García presuntamente opera en los estados mexicanos de Sinaloa y Nayarit, pero tiene influencia en gran parte de la costa del Pacífico de México, así como en Cancún y Monterrey.
Se estima que su organización recibe cocaína de Colombia, vía marítima, que distribuye luego en Arizona, California, Chicago y Nueva York. En México se lo señala como dueño de inversiones en variados negocios y muchas propiedades inmobiliarias.